Cómo serán las evaluaciones de riesgos algún día? (I)

Imaginemos que sí, que la ruta de la seguridad laboral (y áreas adyacentes como el medio ambiente, residuos,…) en los próximos años, sigue una estrategia en la que su gestión consiste en comunicación, colaboración y participación, reconocimiento, motivación y satisfacción, compromiso y determinación, transversalidad y apertura. No es invención mía: Es de esto de lo que se habla en la información que emite la Unión Europea y de la cual he ido hablando en Aragon Valley, sobre todo últimamente. (Ver post anteriores).

Para alcanzar esos nuevos conceptos en las organizaciones, una de las herramientas clave que aparece específicamente es la evaluación de riesgos. No es nuevo, verdad?. De la evaluación de riesgos ya se habla en la normativa existente como el documento básico que ha de servir para establecer planes de prevención, planificación de actividades o determinar medidas preventivas y correctivas.

Pero no es más de lo mismo: Tendrán que evolucionar respecto de lo que suelen ser las evaluaciones de riesgos ahora…

Cómo hacer una evaluación de riesgos para los nuevos tiempos

Para responder a los nuevos conceptos, las evaluaciones de riesgos serán:

  1. Un documento muy simple, comprensible, claro, directo. Para que se favorezca la colaboración y participación de los trabajadores implicados y el compromiso y determinación de la dirección, es necesario que la comprensión del documento sea lo más intuitiva posible.
  2. Sencillas en la forma, valiosas en su contenido. La experiencia de los trabajadores unida a la del técnico de seguridad darán como cresultado un documento orientado a identificar los riesgos y establecer medidas de seguridad. La valoración de los riesgos será menos importante (punto 5).
  3. Una tarea, una evaluación. Cada evaluación se referirá a un trabajo ya establecido en la empresa, sin inventar nuevas actividades. Hablar el mismo lenguaje en toda las áreas de la organización es fundamental.
  4. Evitará referencias externas. Un sólo documento debe ser comprendido por los que la utilizan sin necesidad de acudir a otros procedimientos o instrucciones para su comprensión. También evitará referirse a normativa externa. Cuando nos ponemos a hacer una evaluación, lo que se quiere es evaluar un trabajo, no empezar a entender el por qué de detalles colaterales. Trabajo, tarea, tajo, actividad in our minds.
  5. Por ser un método que requiere comprensión en sí misma, es por lo que la valoración de los riesgos perderá importancia en el documento. Esto no quiere decir que los técnicos de seguridad no hagan una valoración de los riesgos aparte.
  6. Las medidas preventivas que surjan en la ER serán incorporadas a los propios manuales, procedimientos e instrucciones de trabajo. Y lo deben hacer utilizando el lenguaje usado en la compañía.
  7. Como una instrucción de trabajo más, el establecimiento, control y revisión de las medidas de seguridad se realizará por el responsable del área productiva de la empresa junto con los ejecutores del trabajo, sus “propietarios”. El rol del técnico de seguridad será la de auditar, no vigilar.

En próximos días, publicaré un documento de evaluación de riesgos que podría responder  a estos nuevos requisitos.

El rol de los técnicos de prevención

En este contexto, la figura del responsable de seguridad de la organización adquiere una dimensión estratégica. De técnico, vigilante, recurso,…. pasará a ser en la organización un líder a que se refieren los últimos posts.

En el caso concreto de las evaluaciones de riesgos, será necesario desarrollar altas dosis de empatía, capacidad de síntesis y visión periférica.

Las evaluaciones de riesgos y su posterior trabajo, convertidas en un documento hecho realmente por, desde y para la empresa, requerirán una dedicación casi artesanal. Y esa es la actitud que habrá que tener, la de artesano. La calidad del trabajo de prevencionista en su máxima expresión.

No quiero despertar!.

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