Obama, la declaración más decisiva para el cambio climático

Barack_Obama_TwitterBarack Obama dio ayer, martes, en la universidad de Georgetown el discurso más decisivo jamás dado sobre medio ambiente y, por extensión, el que puede ser uno de los más importantes de la historia.

Ya lo fue su declaración de intenciones en el discurso de reelección del pasado febrero, ayer superada por el anuncio de un plan con medidas concretas de actuación sobre el cambio climático que abarca:

  • La reducción en las emisiones de carbono procedentes de centrales eléctricas;
  • Intensificación en el uso de energías limpias;
  • Mejora en los medios transporte de personas y mercancías;
  • Reducción del consumo energético en hogares, negocios y fábricas;
  • Actuación en el sector público, de forma que se establezca como ejemplo a seguir.

Además de:

  • Alertar sobre las consecuencias naturales, económicas y humanas de desastres naturales asociados al clima;
  • Anunciar acciones correctivas y preventivas contra catástrofes naturales basadas en normas de construcción y estándares para determinados sectores productivos;
  • Anunciar programas de adiestramiento de la población frente a nuevas situaciones de emergencia.

Qué tiene de especial este discurso?.

Porque ha habido ya innumerables declaraciones advirtiendo sobre el estado del planeta desde todos los ámbitos especializados (científicos, económicos, humanitarios). Cada año más numerosas y aumentando el nivel de alerta conforme la naturaleza se deteriora. Incluso desde el sector político, altos responsables de la Unión Europea y China o influyentes figuras como Al Gore o Mikhail Gorvachov, convertidos hoy en activistas ambientales.

Técnicamente, Obama no añade ahora nada nuevo que no se supiera. Pero una palabra del presidente de US aporta connotaciones de nivel superior al asunto concreto, el clima en este caso. Y así está contemplado en el plan de Obama: «como el cambio climático tiene alcance internacional, el presidente liderará también los esfuerzos para gestionar el cambio climático global».

Keystone_pipeline_route

Además del ámbito planetario en lo geográfico, el plan influye en muchas actividades económicas de gran peso, dominadas por las más grandes empresas del mundo.

Obama dispara alto aquí también, condicionando el funcionamiento de la Keystone XL -infraestructura que dará a US la autonomía en combustibles fósiles- a que «el proyecto no empeore significativamente el problema climático».

No se alcanzará ese punto. Es un órdago con cartas ganadoras que todo el mundo sabe que no se producirá: esa tubería será climáticamente sostenible sí o sí.

Lo que sí se está produciendo el plan en la práctica, antes incluso de aplicarse, es consecuencias en algunos de los sectores energéticos más afectados: las empresas del carbón se desplomaron en bolsa un día antes del discurso de Obama. No es moco de pavo.

Frases de Obama para la historia.

Obama es un comunicador genial que engancha con el ciudadano con una empatía brutal. El discurso de ayer es una demostración más.

Los datos del cambio climático son susceptibles de tanta manipulación como certeza científica tienen. Son datos utilizados por detractores y defensores de la naturaleza en defensa de sus argumentos ante la indefensa población, que no tenemos ni datos solventes ni los instrumentos adecuados para comprobarlos. Una ciencia que para nosotros es un acto de fe.

Obama tiene datos. Muchos datos pero que, como la inmensa mayoría de nosotros, puede comprobar sólo hasta cierto nivel porque no es un experto y, desde su posición de presidente, ha decidido descender al nivel de ciudadano y elevar su voz como nunca antes un presidente se había atrevido a hacer: «No se puede esperar a la próxima reunión de la Sociedad de la Tierra Plana«, su recado de ayer para quienes desprecian datos científicos. Empatía, inteligencia. Genial.

Otra perla que dejó el discurso de ayer fue una frase en la que decía que «el 75% de la energía eólica se genera en distritos republicanos«. Se me ocurren pocas formas mejores de fomentar una acción en bloque sin distinción política.

*

El tiempo, nunca mejor dicho, pondrá -o no- dentro de unos años a Obama y sus discursos en el lugar que le corresponde. De momento, el paso dialéctico que ha dado es inaudito en un presidente de Estados Unidos.

Usando términos usuales de la cultura americana, esperemos que no se quede en «gatillazo».