El entorno de la autovía A-22 tramo Lleida-Huesca muestra al conducirla una naturaleza especial este año. Un espectáculo de vida y color, con el agua y el color verde como protagonistas. Incluso más al Sur, en el valle del Ebro o el Bajo Gállego, también se observa una frondosidad que ha emergido, incluso por «aquí abajo», a causa de las abundantes lluvias de esta primavera. Estoy hablando de esto:
Pero en ambas situaciones, circulando en coche por la autovía u observando el paisaje en tierras más meridionales, la vista se me va irremediablemente hacia el Norte. Y la imaginación también. Más concretamente a una zona con la que tengo una relación especial: El Somontano. «Cómo debe estar entonces por ahí el paisaje!!?».
Así que, como suelen hacerse estas cosas, esta semana cogí la moto en un impulso y empecé a cabalgar con una idea en la cabeza: rumbo al Noreste por carreteras secundarias.
A SOBRARBE POR EL CORAZÓN DEL SOMONTANO: Ontinar (Zaragoza) – Huesca – Azlor – Adahuesca – Colungo – Guaso – Aínsa. 155 Kms., 18,29 Kgs. de CO2 emitidos a la atmósfera.
Pasado Huesca, dirección Barbastro por la N-240, escondido de la rápida autovía, ha quedado un lugar pintoresco. El San Román, en el desvío de Ponzano. Y la «wiskería»…
Unos kilómetros más adelante, en Peraltilla, el desvío a la A-1231 nos adentra de lleno en el Somontano. Aprovechando un pequeño y reciente camino, hice parada en un lugar muy especial para mí, en el término de Azlor. Aquí, la tierra y yo somos el mismo material.
En Abiego, tomo dirección Adahuesca por la A-1229. En este tramo me cruzo con el único vehículo en todo el trayecto hasta Aínsa :-).
Saliendo de Adahuesca aprovecho para comprar un vino en Bodegas Alodia: un tinto de uva parreleta, autóctona de Somontano. Paso de largo los carteles que señalizan el bello Alquézar y me desvío por la A-2205, que atraviesa el Parque Natural de Guara. Con sus espectaculares barrancos.
Paseando – sí, paseando en moto- por la carretera, paré en varios de sus pueblos (Bárcabo, Arcusa, Latorrecilla,…) a comprar pan. Pero el repartidor ambulante de abastos «acababa» de pasar, siempre. A esas alturas, me siento habitante de otros tiempos del pasado. Sólo las máquinas trabajando en la reparación de un tramo de carretera me recordaron cómo es el presente.
El último pueblo de la A-2205 es Guaso. La vista girado al Sur desde lo alto del pueblo no desmerece.
Y desde allí, mirando al Norte, una visión indescriptible del valle del río Ara. Boltaña al Oeste; Aínsa al Este; La impresionante peña Montañesa destacando al frente; al fondo los grandes picos recién nevados. Y, ocultos enmedio de todo, una infinidad de rincones, antiguas poblaciones hoy deshabitadas, pero no abandonados. Hay una gran historia acerca de esos sitios que pronto os contaré.
Tío eres un crack, me ha gustado mucho tu exposición de la ruta, yo soy del somontano y vivo en sobrarbe, ya ves al revés del mundo, también me gustan las motos, te animo a que sigas explicando tus rutas, trasmites de cojones esa ilusión, gracias.
Muchas gracias! Me alegra saludarte, paisano del somontano :-).
Aunque no es la temática principal del blog, alguna vez no puedo resistirme a poner alguna ruta de las que hago. Últimamente no tengo ninguna publicada, pero si quieres, échale un vistazo a esta serie sobre un viaje que hice por Europa en 2012. Una buena aventura:
http://www.aragonvalley.com/dias-1-y-2-zaragoza-florensac-fra-por-bielsa/
http://www.aragonvalley.com/dia-3-en-montreux-suelo-suizo/
http://www.aragonvalley.com/dia-4-montreux-sui-kuchl-aus/
http://www.aragonvalley.com/dia-5-kuchl-gussing-destino-final/
http://www.aragonvalley.com/dias-6-a-10-gussing-zaragoza-la-cara-b-de-un-viaje-en-moto/
Espero que te gusten.
Saludos,
David Mairal